Título original: Red Country.
Título: Tierras rojas.
Autor: Joe Abercrombie.
Número de páginas: 704.
Sinopsis
Shy Sur creía haber enterrado su sangriento pasado, pero tendrá que recuperar algunos de sus viejos hábitos para rescatar a sus hermanos. Shy comienza la persecución con un par de bueyes y su cobarde padre adoptivo Lamb por toda compañía. Pero Lamb también tiene sus propias cuentas que ajustar… El viaje por las áridas llanuras, marcado por viejas hostilidades, duelos y matanzas, los conducirá a un enfrentamiento con los Fantasmas. Peor aún, les obligará a aliarse con Nicomo Cosca, infame soldado de fortuna, y su abogado Temple, dos hombres de los que nadie debería fiarse.
Opinión personal sin spoilers
Último libro de esta serie de tres y, al igual que los dos anteriores, magnífico. Cierto es que cuesta un poco entrar en canción, que se siente un tanto extraño hasta que te habitúas a él, pero una vez lo haces vuelves a estar como en casa, sentimiento que Abercrombie sabiamente refuerza trayendo de vuelta a personajes emblemáticos de La Primera Ley, La mejor venganza y Los héroes.
En esta ocasión la trama se presenta sencilla. Unos bandidos han asaltado la granja de la protagonista, Shy Sur, una muchacha con un pasado turbulento, y han secuestrado a sus dos hermanos. Ella y su padre adoptivo, Lamb, se lanzarán en su persecución y esta los llevará lejos, a las salvajes Tierras Lejanas. En paralelo veremos cómo el infame soldado de fortuna Nicomo Cosca y su compañía, contratados por la inquisición de la Unión, se dirigen a la misma zona en busca de unos problemáticos rebeldes. Ni que decir tiene que los caminos de Shy y del peculiar mercenario acabarán por cruzarse…
Tierras Rojas es una novela que de buenas a primeras puede parecer un western, quizá por eso cueste entrar un poco al principio. De hecho, Shy y Lamb se unirán a una caravana para cruzar grandes planicies, plagadas de Fantasmas (el equivalente a indios americanos), para llegar a su destino, una lejana ciudad en las montañas que se ha hecho muy popular en los últimos años entre los buscadores de oro.
A pesar de ese trasfondo, un poco más alejado de las anteriores novelas de Abercrombie, los personajes, (ya no solo las viejas glorias rescatadas de libros anteriores, sino los nuevos), complejos, profundos y sobre todo violentos, son tan potentes como en anteriores entregas. También abundan las ricas descripciones (en mi opinión, más abundantes en estos tres libros que en La Primera Ley), los diálogos ingeniosos y el humor negro.
Aunque posiblemente no sea el mejor libro del autor, sí que mantiene un nivel lo suficientemente alto como para recomendar su lectura a cualquiera que haya disfrutado antes de sus obras. Como libro de iniciación, yo recomendaría otros (Los Héroes), pero Tierras Rojas también puede leerse de manera independiente.
Valoración: 8/10
