
Título original: The Haunting of Tram Car 015.
Título: La maldición del tranvía 015.
Autor: P. Djèlí Clark.
Número de páginas: 101.
Sinopsis
Año: 1912
Ciudad: El Cairo.
La maldición de un tranvía aéreo parece un caso simple para el agente Hamed, pero con un presupuesto casi inexistente y un compañero novato, todo puede descontrolarse muy rápido.
Entre rituales que salen mal, jequesas, sufragistas, autómatas que toman conciencia y personajes que esconden más de lo que parece, nuestros agentes necesitarán todo su ingenio para resolver el misterio sin que nadie más salga herido.
Opinión personal sin spoilers
Arranqué a leer esta novela corta porque había visto alguna que otra reseña positiva de ella y la verdad es que su extensión, tan reducida, anima a intentarlo. Me llevé una grata impresión, aunque he de confesar que no me ha enamorado.
En el lado positivo he de señalar que el autor, P. Djèlí Clark, te hace zambullirte en un mundo exótico, tanto porque la historia se desarrolla en el Cairo (con lo que tanto los personajes como todo lo que les rodea, bien sea la vestimenta o incluso la comida que ingieren, tienen ese toque oriental), pero un Cairo alternativo, steampunk y en el año 1912 (con lo que la tecnología de principios de siglo XX está mezclada con la magia, los rituales y los espíritus).
El argumento es sencillo y está muy bien narrado: el tranvía 015, dentro de la red de transporte de la ciudad, está encantado y los protagonistas, dos miembros del Ministerio de Alquimia Encantamientos y Entidades sobrenaturales, tendrán que solucionar este problema. A partir de aquí se construye una trama policiaca, de investigación y con ciertos toques de misterio, como si fuera una obra de Agatha Christie.
En el lado no tan positivo, pero esto es una opinión muy personal, la obra se queda un poco a medio camino entre una novela policiaca y una de fantasía, sin tantos elementos como me hubieran gustado de un género y el otro. Con todo, creo que es un trabajo muy fresco y original. Puedo recomendar su lectura tanto porque se puede devorar de una sentada como porque su aire desenfadado la hace apta para jóvenes y mayores.
Valoración: 7/10