
Título original: Godsgrave.
Título: Tumba de dioses.
Autor: Jay Kristoff.
Número de páginas: 669.
Sinopsis
Quédate con la gloria.
Yo me quedaré con la sangre.
En una tierra de tres soles que nunca dan paso a la oscuridad, Mia Corvere ha encontrado su lugar en la Iglesia Roja, la famosa escuela de asesinos.
Sin embargo, aún no ha podido llevar a cabo su venganza. Cuando sospecha que la propia Iglesia está impidiendo que acabe con el hombre que mató a su familia, se vende a sí misma a un reclutador de gladiadores para poder enfrentarse a él.
En los pasillos del coliseo hace nuevas amistades y nuevos rivales, y empieza a preguntarse por su afinidad con las sombras. Pero a medida que se urden conspiraciones y comienza el recuento de cuerpos, Mia se ve obligada a tomar una decisión con graves consecuencias: lealtad o venganza.
Opinión personal sin spoilers
Si Nuncanoche, la primera entrega de esta trilogía, te dejó con un muy buen sabor de boca, esta segunda es incluso mejor.
Durante la primera mitad de este libro, la historia va a estar dividida en dos (de manera muy similar a como Kristoff hizo con Nuncanoche). La primera parte de cada capítulo transcurre pocos meses después de donde concluyó la anterior entrega, con Mia como hoja de la Iglesia Roja cumpliendo un encargo (un asesinato, por supuesto) para la escuela de asesinos. La segunda parte de cada capítulo está situada más adelante en el tiempo. No se especifica cuanto, aunque se intuye que no mucho. Lo que si es muy misterioso es ver que Mia está dejándose capturar para convertirse en una esclava y que cuando tiene la oportunidad de escapar no la aprovecha.
A medida que avanzan las páginas, se va descubriendo cómo se enlaza una trama con la otra (de manera muy interesante, la verdad) y se descubre que el objetivo de Mia es formar parte de una casa de gladiadores… peeeeero quizá no de la manera que ella pretendía ????
A partir de aquí la trama principal del libro va a mostrar el entrenamiento de Mia como aprendiz, junto al resto de gladiadores de su casa, y los primeros combates de nuestra protagonista en la arena tras superar el periodo de aprendizaje. Entretejidas con está habrá varias subtramas secundarias, que añaden riqueza a la historia. También iremos conociendo el ambicioso, casi imposible objetivo final de Mia, y por supuesto, todos los problemas que tiene que resolver, todas las dificultades que tiene que sortear, para siquiera llegar a tener una oportunidad de acceder a dicho objetivo.
En resumen, es un libro apasionante, con la pluma de Kristoff, elegante, rica, al punto de ser demasiado recargada, pero que mantiene un nivel que no satura. La historia es más adulta que la anterior (adiós a las vibraciones de Harry Potter, aunque sí que he de decir que hay que saludar a las de Spartacus, aunque supongo que cualquier relato de gladiadores va a recordar a esta serie…), las sorpresas más inesperadas que en la primera entrega y diría que el ritmo es un poco más dinámico (no que el de Nuncanoche fuera lento…).
Devoré el libro en dos semanas y media. De acuerdo que estaba de vacaciones y eso también ayuda. Lo recomiendo cien por cien. En el improbable caso de que comiences a leer Nuncanoche y no te esté encantando, merece la pena hacer un esfuerzo para llegar a Tumba de Dioses.
Valoración: 9/10